martes, 5 de junio de 2007

Contexto histórico del franquismo

The Franco's regime is necessary to understand it inside Europa's climate after the first world war, the victory of the Bolshevik revolution and the emergence of the working movement and Socialists of Europa and his counterpart; the fascism in Italy and the Nazism in Germany. The Franco's regime is the military response of right to the victory of the republican and socialistic ideas in Spain expressed in the victory of the popular front. The Franco's regime is restored as response to the popular government and somehow the expression of a very much major struggle that already was crossing the world expressed by the capitalism led by the USA and the socialism led by the USSR. This dictatorship emerges as the opposition to the popular government and develops during the Spanish civil war and is restored as regime on having triumphed in the civil war, being proclaimed francisco Franc as his commander. The pro-Franco regime finishes with francisco's death Franc in 1975 and the Referendum for the Political Reform in 1976.



Las principales características del régimen franquista fueron, una dictadura militar, aliado a los sectores más conservadores tanto de la gran burguesía como de la iglesia. Profunda represión a los perdedores de la guerra civil española. La política económica de mercado establecida en este período es autarquica y se basa en la intervención directa del Estado en asuntos económicos y en la autosuficiencia económica que limitaba el comercio con el resto del mundo. Ideológicamente las bases del mismo régimen estaban bajo la doctrina del nacionalcatolisismo, la unidad nacional española, y el anticomunismo.
Entre los años 1960 y 1970 hubo un notable desarrollo económico, aunque con grandes desigualdades, manteniéndose el régimen dictatorial.
Con el desarrollo económico emerge una capa media, sector que junto con los estudiantes y trabajadores, llevaron a cabo luchas democráticas. A partir de las derrotas de las potencias del Eje en la Segunda Guerra Mundial, el régimen se va deshaciendo de su carácter pro-fascista, aunque sigue utilizando su simbología.


El franquismo tuvo que buscar nuevas alianzas internacionales, y fue disminuyendo el papel de la Falange en favor de otros grupos. En la década de los años 60 apareció una generación de políticos tecnócratas formados en el Opus Dei y se rompió el aislamiento internacional, a lo que contribuyó decisivamente su ubicación geográfica y régimen político pasando a ser aliado de Estados Unidos en la guerra fría y su disputa con la un Unión Soviética.
El rey Juan Carlos I de España fue el sucesor designado por Franco para la Jefatura del Estado, y a su muerte juró acatar los Principios del Movimiento Nacional destinados a perpetuar el franquismo. Sin embargo se basó en ellos para promover el Referéndum para la Reforma Política. Su resultado, 94% a favor de la reforma, inició la Transición Española hacia la democracia parlamentaria.


Dentro del régimen franquista hubo una serie de etapas. Una de ellas se denominó Los años perdidos, el cual abarcaba desde los años 1939 a el 1954. Entre estos años España había perdido en la guerra un número importante de su población y de su capacidad productiva. La escasez multiplicó las situaciones de hambre y perpetuaron la miseria extrema. La situación empeoró porque meses después de acabar la guerra civil española empezó la Segunda Guerra Mundial de 1939-1945.
España se declaró no beligerante en la guerra mundial. En un comienzo manifestó su apoyo a Italia y a la Alemania Nazi, pero evitando siempre la participación directa en la guerra. Tras la entrevista de Hendaya, la actuación más significativa fue la movilización de españoles, voluntarios o movidos por otras circunstancias, para la división 250 de la Wehrmacht, División Azul, que combatió en la Unión Soviética.
Mientras tanto España mostraba a los aliados una posición de neutralidad, que se fue haciendo más clara conforme la situación fue favoreciendo a estos. Sin embargo la posición ambigua de España llevó a que la victoria aliada supusiera el aislamiento internacional del régimen.
Otra de las etapas fue el Fin de la autarquía (1854-1959). Se dice que el fracaso del modelo autárquico llevó a un giro en la política económica. Se liberalizaron parcialmente los precios, el comercio y el tránsito de bienes. En 1952 acabó el racionamiento de alimentos, ayudando a la economía pero solo hasta 1954.Los Estados Unidos y la Unión Soviética habían sido aliados en la guerra mundial, pero luego alejaron rápidamente sus posiciones. Una parte fundamental de la Guerra Fría fue la extensión y afianzamiento de la influencia soviética en el Este de Europa y la contención por parte de los Estados Unidos y sus aliados en el resto del continente. Dentro de esta lucha de poder e intereses estratégicos, Estados Unidos estableció bases militares en territorio español. Como contrapartida, en 1951 España empezó a recibir asistencia económica. Esta cooperación fue muy inferior a la que recibieron las democracias parlamentarias incipientes que se habían beneficiado del Plan Marshall inmediatamente después de la Guerra Mundial: Reino Unido, Alemania Occidental, Francia y Japón. Sin embargo, años después de las guerras la carestía de España seguía siendo tan grande que las importaciones limitadas de bienes de equipo fueron fundamentales para acelerar el desarrollo. Este también trajo inflación monetaria y el consiguiente malestar social. En 1957 un grupo de tecnócratas del Opus Dei entra en el gobierno y dio el giro definitivo a la política económica.


La "dicta blanda" y el "aperturismo" (1959-1975) tuvo otras etapas, una de ellas fue la llegada del Plan de Estabilizacion entre los años 1959 y 1961 donde los tecnócratas del Opus Dei llegaron al gobierno en 1957 y pusieron en práctica un duro Plan de Estabilización conforme con las directrices del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI), cuyo efecto social fue la emigración de unos dos millones de españoles, en los años siguientes. Se liberalizó la economía, acabando con la autarquía y el intervencionismo del Estado. Se recortó el gasto público, se abrió la economía al exterior, se devaluó la moneda y se facilitaron las inversiones extranjeras. Como consecuencia a partir de 1961 se precipitó el crecimiento económico.
La siguiente etapa de la "dicta blanda" y el aperturismo fue el desarrollo economico (1961-1973). La situación favorable en el mundo llevó a que crecieran rápidamente la industria y los servicios en España. Las inversiones extranjeras llegaron atraídas por los bajos costes laborales. El desarrollo acabó con el paro. Se desencadenó la emigración desde las zonas rurales hacia las zonas industriales españolas y de otros países de Europa. España consiguió llegar a tener superávit en su balanza de pagos. El déficit histórico se compensó con los ingresos del turismo, la inversión extranjera y las grandes cantidades de emigrantes en otros países de Europa.
La emigración de las zonas rurales causo el empobrecimiento de ellas por la poca presencia industrial o turística.
El gobierno aprobó a partir de 1963 varios Planes de Desarrollo que pretendían corregir con incentivos fiscales y ayudas estatales los peores resultados del desarrollo económico. La economía siguió creciendo pero la planificación no dio resultado y creció el desequilibrio entre regiones.


Los años sesenta supusieron un cambio social significativo. La emigración rural a las ciudades y a Europa occidental. Más de un millón de españoles se desplazaron a Francia, Alemania, Suiza, Bélgica y otros países europeos para desempeñar los trabajos con menos demanda local. La emigración trajo las consecuencias positivas reseñadas, pero también el desarraigo humano y el aumento de la diferencia de riqueza entre regiones del país. Por ultimo el aumento de la población. Se reducía la tasa de mortalidad y aumentó la tasa de natalidad que ya estaba en valores relativamente altos.
Desde 1963 aumentaron las prestaciones sanitarias y los sistemas de pensiones. La Seguridad Social se extendió por primera vez a todos los ciudadanos. El déficit de vivienda se resolvió con campañas de construcción masivas que respondieron a la multiplicación de la población en las zonas industriales.





El Franquismo es un sistema totalitario al igual que el Nazismo y el Fascismo, pero podemos ver claramente que no fue del todo extremo y eso se representa en que no participo activamente de la segunda guerra mundial debido a los problemas económicos y sociales que existían en España, problemas que no se manifestaban tan duramente en Italia o Alemania. Es por esto que el franquismo no es uno de los sistemas totalitarios o represivos más importante, a pesar del mucho tiempo que duro este y demostrando el gran poderío que tenia en España.


http://www.historiasiglo20.org/HE/15.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Franquismo
"La Enciclo", Editorial Arrayan

Cristóbal Astete

1 comentario:

Carolina Valdés Acuña dijo...

Cristóbal:
buen ensayo, pero lo sentí en ocasiones sin el hilo cnductor necesario, aún así es un buen trabajo.
Nota: 6.5